Hoy os traigo un caso personal, donde vais a entender lo injusta que es la justicia y como en vez de facilitar las cosas, para que las personas afectadas tengan un mínimo de dignidad y paz, se hace todo lo contrario, haciendo que sus pesadillas, malas experiencias o problemas, no se vayan nunca. Realmente es un tema que, asociado a mis problemas de colon irritable, no hacen más que provocarme angustias innecesarias. Hoy quiero denunciar como las empresas de seguros, tienen unas formas de trabajar que van en contra de los asegurados, y cuentan con el beneplácito de la justicia que en vez de poner tierra de por medio y entender que no es normal, miran a otro lado mientras te fustigan de manera innecesaria.
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El caso.
Desde hace 6 años, tuve que dejar mi vivienda en propiedad para venir a la ciudad. No es por nada grave, sino por temas familiares. La distancia (mi vivienda está a las afueras de Barcelona), el nacimiento de dos hijos, mis horarios…, todo hacía que estar allí fuera complicado. Así que como la vivienda no se puede vender (perderíamos dinero de inversión), decidimos alquilarla. Ya ese paso ha sido complicado puesto que hemos dejado de recibir unos ingresos de la Agencia Tributaria que nos iban muy bien. Pero es lo que había que hacer, y hemos pasado a ser propietarios que alquilan su vivienda. Pero no nos aprovechamos de la situación y el piso se alquila a un precio razonable. El tema es que tenemos un seguro de impagos, y por desgracia, se tuvo que hacer uso de él.
Los morosos.
Mis “queridos” inquilinos, no los de ahora con los que estoy muy contento, los anteriores, a los dos meses de estar en el piso, me dijeron que el alquiler era alto y que querían pagar 555 euros. Nos quedamos de piedra puesto que hacía dos meses, habían firmado el contrato de alquiler que era de 700 euros. Evidentemente les dije que ellos habían firmado un contrato y que había que respetarlo.
A lo que me dijo que o pagaba 555 euros o dejaba de pagar. La situación ya estaba en un punto que como comprenderéis, no es favorable. El tema es que no aceptamos sus chantajes, como es lógico y como invito a cualquiera que no haga. Esto supuso que como dijo, dejó de pagar. Se activó el tema del seguro de impagos y durante el año que estuvieron en el piso, sin pagar ni suministros ni alquiler, el seguro de impago se hizo cargo.
Como se ejecuta el impago.
El sistema de cobrar por parte del seguro es el siguiente. Llega la fecha que tendrías que haber cobrado, y no has cobrado, llamas y lo dices, desde que lo dices, pasa entre una semana y diez días máximo y cobras. Es decir, ya estás cobrando tu renta tarde, y a disgusto porque tienes que reclamarlo. Así estuvimos 10 meses.
Por suerte, la orden de desahucio llegó cuando concluía la finalización del seguro de impago, porque a partir de ese momento, tendría que haber hecho frente a un alquiler caro en Barcelona y a una hipoteca del otro piso. Un escenario totalmente inviable con nuestros ingresos. Así que al final, gracias al seguro de impago, estuvimos cubiertos durante ese año de pesadilla.
El inquilino moroso.
Para que os hagáis una idea de lo injusta que es la justicia…, este personaje, estuvo un año viviendo en el piso sin pagar absolutamente nada. Pero como con eso no tiene suficiente, a los 7 meses de estar allí por la patilla, no se le ocurrió otra idea que ir a “okupar” otra vivienda dejando la mía en manos de un nuevo inquilino, que a saber que le pagaría.
Esto yo lo sé porque los vecinos le vieron sacar sus cosas y entrar a una persona nueva. Imaginaros como se me quedó a mí el cuerpo cuando, con fecha para el desahucio, me entero que en el piso hay un nuevo inquilino ilegal. El abogado me tranquilizaba y me decía que no hiciera absolutamente nada. Con lo cual, estuve tres meses malviviendo con mi colon irritable, con problemas para dormir, pensando en que posiblemente, no iba a recuperar mi piso ya que, al ir al desahucio, habría otro inquilino y habría que iniciar otra orden de desahucio.
Los 3 meses.
Fueron los tres meses más duros de mi vida. Y he vivido situaciones complicadas, como la pérdida de un padre tras 9 meses en la UCI y 4 en coma. Pero os aseguro que esa situación fue mucho más dolorosa. El saber que hay alguien en tu vivienda, que te ha costado sudor y lágrimas sacar adelante, y que no puedes hacer nada legal para sacarlos…, es muy doloroso. Y así estuve tres meses, esperando y contando como gotas de agua en un grifo mal cerrado que llegara el día. Por suerte, llegó el día y el inquilino moroso, hizo entrega de las llaves.
El sinvergüenza quería dar las llaves en la calle, a lo que evidentemente se le dijo que no. Es importante no hacer eso, porque si lo haces, puedes subir y que haya otras personas, con lo que él no se hará responsable. La entre de llaves se hace en el piso.
Estado del piso.
Pues si el dolor que había sufrido durante esos 3 meses ya se empezaba a ir al saber que iba a recuperar mi vivienda, al abrir la puerta vino con efecto rebote. El piso estaba en un estado de abandono absoluto. Cosas rotas por todos lados, muebles y paredes destrozadas, picas con mugre de no haberse limpiado en meses…, y para colmo, el sinvergüenza del inquilino diciendo que si estaba sucio era porque no le había dado tiempo de limpiar porque se había tenido que ir rápido. Increíble.
Ese piso, estuvo los 3 meses que lo realquiló, con una o más personas que hicieron vida en él sin limpiarlo y sin preocuparse de nada. Mi cuerpo estaba entre la alegría de recuperar mi piso, y la tristeza de ver cómo años de trabajo para adecuarlo a mis necesidades, habían quedado reducidas a la nada por unos sinvergüenzas que se aprovechan de la injusta que es la justicia.
Rehabilitando.
Por suerte, el piso estaba sin apenas muebles, y con los dos meses de fianza que teníamos de los sinvergüenzas, que, como apunte, diré que tenían un hijo pequeño, pudimos rehabilitar la vivienda. Tuvimos que poner dinero de nuestro bolsillo, sí, pero por suerte, no fue una cantidad desorbitada. Hablamos de entre mil y dos mil euros para dejarlo ya totalmente rehabilitado. Decir que, a nivel seguro, es complicado porque la mayoría de cosas pasan de aceptarlas. Te dicen que es desgaste y que no lo cubren.
Curioso que un cristal roto, grifos rotos, tuberías rotas, todo sea desgaste. Y si no es desgaste, es que no se puede verificar que sea por mal uso del inquilino. Vamos, que se le protege al máximo. Y yo puedo entender que se pueda querer atribuir al inquilino, problemas que no ha ocasionado él, pero sabiendo que estamos ante un caso de morosidad…, la justicia tendría que facilitar a un mediador que, a la hora de la entrega de llaves, diera veracidad a que todo lo que se está denunciando, es correcto y que no se ha modificado para penalizarlo más. Pero como digo, la justicia es muy injusta y yo, personalmente, no tengo fe en ella.
Juicio.
Se celebra un juicio ya que lo hemos denunciado por todo lo acontecido. Evidentemente no se presenta al juicio y el juez dicta sentencia en su contra, haciéndole abonar parte de los gastos derivados de los presupuestos que se presentan de la rehabilitación, más los meses impagados. En este punto, decir que la fianza era de mil cuatrocientos euros, y los tres presupuestos presentados de rehabilitación de todo lo extraviado por el personaje asqueroso que tenía viviendo allí eran de más de tres mil quinientos. Nosotros porque somos precavidos y tenemos ahorros, pero si no tuviéramos ahorros, yo no podría haber rehabilitado mi vivienda y no podría haberla vuelto a alquilar. Con lo cual, de nuevo estamos expuestos con el tema de vivienda en alquiler.
Empieza el show.
Ahora viene la parte más interesante de la historia. Resulta que el inquilino moroso tiene una deuda con la empresa del seguro de impagos de más de 8 mil euros por los meses impagados. Y de lo que me corresponde a mí, descontando lo que la empresa aseguradora me ha pagado, son unos 400 euros a mi favor. Es decir, yo estoy más o menos saldado. Pues bien, el colmo de los despropósitos es que, a este sinvergüenza, la justicia le va embargando pequeñas cantidades, de donde pueden coger, eso significa que cada 2 o 3 meses, le consiguen retener unos 120 euros.
Esa es la cantidad que se me entrega a mí. Pero a mí, se me deben 400 euros, con lo que estoy cerca de tenerlo cubierto. Pues agarraros fuerte que vienen curvas. La justicia, entiende que, pese a que mi deuda está saldada, como la empresa aseguradora me ha adelantado el dinero a mí, soy yo el que tengo esa deuda con ellos, con lo que cada dinero retenido al personaje en cuestión, se me abona a mi cuenta, y yo tengo que abonarlo a la cuenta de la aseguradora. INCREIBLE.
No tiene sentido.
Es decir, con lo expuesto, la justicia lo que viene a decirme es que como no he tenido bastante con el sufrimiento de ver cómo han ocupado mi vivienda y la han destrozado, algo que me ha costado salud, y secuelas como caída excesiva de pelo entre otras cosas, pues no, eso no es suficiente dolor y ahora me toca aguantar años de sufrimiento al recibir un dinero de una persona que me ha maltratado, y encima siendo un dinero que no es para mí, porque es para una empresa aseguradora.
La justicia entiende que no puede autorizar que esa deuda con el propietario ya está saldada y que el resto de dinero es para una empresa aseguradora. Es decir, la justicia, acepta y da orden de que, a mí, como propietario, se me maltrate durante décadas. Y es que a 120 euros cada 3 meses de media, son un total de 480 euros al año, lo que suponen un total de 20 años más o menos de media, para cerrar este bochornoso capitulo.
El inquilino moroso.
Y de nuevo vamos al punto donde la justicia es injusta. Como no existe un sistema unificado de morosos, donde una persona que vaya a alquilar una vivienda, en caso de haber hecho lo que ha hecho este personaje, salga reflejado y se le niegue el alquiler…, pues pasa lo que pasa. Se va a otra vivienda y hace lo mismo. La justicia lo tiene documentado y no hace nada. Entiendo que lo primero que debería pasar es que el niño (un bebé cuando entró en mi piso) fuera a una familia de acogida puesto que esa familia, no se puede hacer cargo de él.
Y no se puede hacer cargo porque de igual manera que no tiene dinero para pagar alquiler, se supone que no tiene dinero para cubrir sus necesidades básicas. Si esa persona deja “cadáveres” por donde pasa, entiendo que el menor no es el mejor sitio para estar. Pero no, mejor dejamos que vayan a otra vivienda, que queda legalmente alquilada por una persona que se supone no tiene ingresos o garantías, pero lo hace. Y eso lo hizo conmigo, pagando a una empresa que se supone que controla estas cosas. Pero no, lo hacen porque la justicia no es justa, mira a otro lado y permite que, como yo, otra familia vaya a sufrir la falta de escrúpulos de este individuo.
Dato extra.
Los dos personajes que tenía metidos en mi piso, eran dos personas que trabajaban en una empresa muy grande, una que tiene tiendas de electrodomésticos y ellos se dedicaban o se dedican a la parte de informática. Vamos, que son dos sueldos fijos, no eran bajos, y tenían una antigüedad alta. Pero, sin embargo, ahora son personas que no tienen ingresos para retener, y que tienen que dejar a una o más familias jodidas porque la justicia, no ha sido justa y no ha sido implacable con los que se aprovechan de lo blanda que es para poner tierra de por medio y evitar que la bola se siga haciendo más grande.
Conclusión.
Es muy triste que se permitan este tipo de cosas. Debería ser todo rápido, y si estás en un sitio donde tienes por contrato que tienes que pagar, si a los tres meses no pagas…, a la calle. No hay más. Y me da igual situación personal, niños y demás. Porque si no llega a ser por el seguro de impago, que lo mío me cuesta, yo hubiera estado un año, teniendo que pagar mi piso en alquiler, y encima dejar de ingresar esa cantidad que sirve para cubrir los gastos de hipoteca y poco más. Es decir, el moroso podría llegar a provocar la morosidad de otra persona que hace las cosas bien y que no puede vivir por su cara dura. Es necesario un registro común donde el moroso quede expuesto, y que no sea posible alquilar viviendas si tienes un historial como el del pájaro éste.
Pero eso no pasará, porque los que alquilan pisos son los primeros interesados en alquilar sin parar. Si hay un moroso, para ellos mejor, lo sacarán y volverán a alquilar el piso volviendo a ingresar gastos de gestión. Es todo realmente triste, y lo que es peor, al que hace las cosas bien acaba penalizándole mucho. No es normal que la justicia no se ponga de mi lado, y entienda que, si yo ya he cobrado lo que me toca, el resto de deuda recuperada, no es para mí, sino para otra entidad. Al final, se trata de poner un número de cuenta u otro. Es la diferencia entre dejar vivir a una persona honrada su vida, o machacarla cada poco tiempo y recordándole al que le ha maltratado. No me parece justo. Secciones: CANAL TELEGRAM //💰 CHOLLOS // ⛑AYUDA // 🎼MUSICA //💬COMENTARIOS
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